¿Tiene una persiana enrollable que no baja con suavidad? Entonces, por supuesto, puede intentar reducir la fricción con lubricantes. Pero eso no siempre da resultados suficientes. Sobre todo si se trata de una persiana pequeña o ligera.

En ese caso, los contrapesos son una buena opción, ya que pueden introducirse fácilmente en el riel inferior. La gravedad hará el resto.

Deslizarlos es fácil gracias a los extremos redondeados. La longitud es de 30 cm, por lo que puede determinar fácilmente cuántas piezas necesita. No es necesario cortarlas.

Y basta con deslizar tantas piezas como quepan y sean necesarias para un funcionamiento correcto. Estas piezas también pueden ayudar con motores como el RS100, que determinan el sentido de giro debido al peso de la persiana.

Para evitar la oxidación, las piezas están galvanizadas.